Luis Moisés Torres es un testimonio de superación y amor por la fotografía
A través de su lente, no solo captura imágenes, sino también historias, memorias y emociones.
A través de su lente, no solo captura imágenes, sino también historias, memorias y emociones.
Luis Moisés Torres nació el 4 de marzo de 1968 en el
distrito de Alto Verde, un lugar que siempre llevará en su corazón. Hijo de
padres trabajadores en una viña, su infancia estuvo marcada por momentos
felices y sencillos en la calle Bellene, donde desarrolló una profunda conexión
con sus raíces y la cultura local. En esos años,
Su vida dio un giro inesperado tras un accidente laboral que
le costó la visión de un ojo. Sin embargo, lejos de verse como una víctima de
las circunstancias, Luis encontró una nueva pasión: la fotografía. Esta
disciplina se convirtió en su salida laboral y, con el tiempo, en una fuente
inagotable de satisfacciones personales y profesionales. Así, lo que
inicialmente parecía una limitación se transformó en una oportunidad para
explorar un mundo lleno de posibilidades.
La
fotografía tiene un papel crucial en la historia, sirviendo como documento histórico que narra lo que a menudo se olvida. Por eso, cada imagen que captura es un legado que perdura a través del tiempo.
Luis también siente una profunda gratitud hacia mentores que han influido en su trayectoria, como Mauricio Ledda, Néstor Navarro y el querido Guillermo Flores integrantes del Fotoclub San Martín, quienes le brindaron el primer impulso. Este espacio se convirtió en un refugio creativo, donde pudo desplegar la pasión por la fotografía.